La película Cinema Paradiso es de las mejores películas que le rinde tributo a la industria del cine.
La escena final es mi parte favorita de la película. Como Alfredo le dejó ese regalo a Salvatore… cualquiera llora. Ese gesto tan sutil, los ojos llorosos y el simple hecho de estar rodeado de la belleza del regalo. También el crescendo de la pieza de Morricone le da un toque especial a la escena.
Me atrevo a decir que esta escena es el mejor final que ha tenido una película en la historia. Uno ve esta escena y va a la par con lo que siente Salvatore. Es una película hermosa que le recomiendo a todo el mundo que la vea, un clásico.