El conformista, dirigido por Bernardo Bertolucci, trata sobre Marcello Clerici, quien pertenece a la policía secreta fascista y es ordenado a asesinar al Professor Quadri, un intelectual anti-fascista. Esta premisa es bastante superficial, ya que la historia presenta la complicada identidad de Marcello, una que él mismo no entiende del todo, a través de la misión que le han encargado. Vemos su niñez traumática en la que era acosado por sus compañeros de clase, víctima de agresión sexual y el responsable de un asesinato. Quizás todos estos elementos, junto con ser parte del régimen fascista, lo conducen a querer obtener un sentido de normalidad, el cual trata de encontrar en su prometida Giulia. Este mensaje político esta acompañado con un gran uso de colores y de composición escénica por parte de Vittorio Storaro, haciendo que la película sea visualmente atractiva. Esta característica fue la que más me gustó, y le recomendaría esta película a cualquiera.